Descripción
En algún lugar de las pampas, dos personas caminan por el borde entre un campo florido y la maldad que siembra muerte a su alrededor. Brulé y Teresa, detectives circunstanciales, resuelven casi siempre los casos. Algunos esconden crueldad detrás de paredes blanqueadas, otros a seres descarados e insolentes.
Se trata de un romance maduro y la gracia que los redime a través de las estaciones, a ellos, tan cansados del mundo.
Su historia, sellada de emblemáticos gestos de afecto y ternura, es narrada en un lenguaje simple y conmovedor.
En cuanto al autor, Jonathan Zachary Burke, hijo de pastores anglicanos baste decir que solía jugar en los campos bajo la atenta mirada de Vladimir Flores.
Siempre añoro regresar a San Agustín, esta obra es su homenaje a la tierra que lo vio crecer.